Gabriel Crust (Brasil, 1987) desafía a la naturaleza creando seres a partir de sus experiencias cotidianas, de los sentimientos que percibe en una otredad misteriosa y cambiante. Retrata todos los elementos que encuentra más allá del rostro, los une y da vida –cual doctor Frankenstein– a monstruos sensibles que buscan su lugar en el mundo. Gabriel Crust parte del grafiti y el arte urbano como estilo e inspiración, su obra fluye con el ritmo veloz de la ciudad de Sao Paulo.