Venus 33
Venus pata negra, la misma puerca pero revolcada es el sincretismo entre un icono pop de la cultura mediática actual y uno de los objetos escultóricos más antiguos de los que se tiene registro, explorando las poses clásicas de representación de la femineidad en la historia del arte, mezcladas con poses de calendario rayando en la pornografía y aplicando diversidad racial, mostrando el rol activo sexual de un personaje caricaturesco con el que toda una generación puede empatizar. Derivado del proyecto La puta de Babilonia dedicado a generar un “objeto de deseo”, esta colección está dedicada a generar un “objeto de veneración”. Emilio Rangel México, 2020 Modelado en plastilina epoxica pigmentada 25x19x35cm
Calystegia malacophylla
Citlali Haro México, 2018
Acrílico sobre lienzo 80 x 80 cm
Pezón con pie roto
Daniela Terroba México, 2019 Serigrafía y acrílico sobre papel *Esta pieza pertenece a la serie "¿De dónde surgen las formas?" 65 x 50 x 5 cm
Bilocación A
Paola Estrella México, 2019
Mixta
51.1 x 71.1 cm
Tríptico
Hiena dos bocas, estudio para grabado
Héctor Vargas México, 2019.
Tinta y lápiz de color sobre papel.
37 x 28 cm
Sin título. De la serie “Diluvios y Apocaliptos: Imágenes del porvenir”
Rodrigo Imaz México, 2021
Grabado a la punta seca sobre papel
56 x 43 cm *Incluye marco*
Las Brujas
Paola Estrella México, 2020
Screen-pinting
116 x 82 cm
*Edición numerada: 1 de 3.
Sin título IV
Daniela Terroba México, 2015
Acrílico, aerosol y lápiz sobre papel de algodón
90 x 70 cm
Ballenavión. De la Serie “Animales apócrifos”
Rodrigo Imaz México, 2021
Grabado en metal al aguafuerte y la aguatinta
79 x 126 cm *Incluye marco*
Cápsulas de autodestrucción 1/ D. Mini amarillo. De la Serie “Distorsiones”
Francisco Esnayra México, 2021
Resina
27 x 5 x 7 cm *Incluye soporte*
Masaccio
Manolo Garibay México, 2019
acuarela/papel 40 x 60 x 5 cm
Pez
Paola Estrella México, 2020
Fotografía
50 x 34 cm *Edición numerada: 1 de 6
Minotauro
Rodrigo Imaz México, 2021
Acrílico sobre papel
112 x 80 cm *Incluye marco*
Plaza sepia
Adriana Mejía México, 2011
Óleo sobre tela
80 x 120 cm
Small Drawing 05
Personajes etéreos inspirados en los dibujos de Lautrec, antiguas estampas Ukiyo-e y heroínas del manga japonés de los 90’s aplicadas en un ejercicio tradicional a plumilla y acuarela sobre papel de algodón. Violeta Hernández México
Tinta y acuarela
15 x 15 cm *Incluye marco*
Serie Ticktock the blocks
Jorge Moedano México, 2021
Óleo sobre madera
20 x 16 x 16 cm
Venus 28
Venus pata negra, la misma puerca pero revolcada es el sincretismo entre un icono pop de la cultura mediática actual y uno de los objetos escultóricos más antiguos de los que se tiene registro, explorando las poses clásicas de representación de la femineidad en la historia del arte, mezcladas con poses de calendario rayando en la pornografía y aplicando diversidad racial, mostrando el rol activo sexual de un personaje caricaturesco con el que toda una generación puede empatizar. Derivado del proyecto La puta de Babilonia dedicado a generar un “objeto de deseo”, esta colección está dedicada a generar un “objeto de veneración”. Emilio Rangel México, 2020 Modelado en plastilina epoxica pigmentada 22x18x17cm
b´zudi
Ricardo Ángeles México, 2010
Acero dulce modelado y cromado y, acero dulce forjado y choque térmico .
168 x 15 x 15 cm
145 x 16 x 16 cm
Secuaz de Marte 1
Emilio Rangel México, 2021 Modelado en resina epóxica, pigmentos y fierro 41 x 21 x 20cm
Bajo la noche II
Jorge Rosano Gamboa México, 2017
Fotografía digital sobre papel algodón
90 x 60 cm *2da edición de 3
United 01
Said Dokins México, 2021
Acrílico, aerosol y tinta india sobre papel de algodón 300g
66x100 cm *No incluye marco* "Todo lugar en donde escribo es un lugar sagrado" El proyecto ‘Espacios sagrados’ (Sacred Places) consiste en el desarrollo de un cuerpo de obra que parte de la reflexión en torno al acto escritural y sus potencialidades que se desdoblan en operaciones diversas, entre ellas, la escritura ritual y la caligrafía como espacio de negociación entre lo profano y lo sagrado. Lejos de una conceptualización de lo sagrado en términos de una religión en particular o como ‘creencia’, me interesa entenderlo como un modo de ser en el mundo, de experienciar eso que dinamita la potencia, la fuerza y la brújula de orientación en el mundo, aquello por lo que se estaría dispuesto a dar la vida. En la serie ‘Palabras ocultas -Hidden Words-’ la sacralización de lo cotidiano -en particular de una acción que ejecutamos tan a menudo como lo es el acto escritural- estriba en darle un sentido de profundidad a una práctica que en su carácter vernacular amplía el espíritu a una dimensión liminal, desconocida e incluso peligrosa, como algo que le sobreviene o sobrepasa pero que es también producto de la experiencia creativa, la cual en su condición performativa supone tanto el descubrimiento como la producción del enigma. En este sentido, estos ‘ejercicios sígnicos’ -como les llamo a mis obras- son esa extensión sagrada en la cual experimento con el papel, la gestualidad, la mancha y la deconstrucción de la letra. Cada ejercicio explora uno de los tres ejes estético-conceptuales que componen la práctica ritual: la repetición, el tiempo y la unidad. En las obras tituladas Sacred Places abordo las nociones de espiritualidad, de conversión de los lugares cotidianos en espacios de excepción, la configuración del ámbito sagrado desde la repetición; el volver a una cosa, a una frase, a un gesto o un detalle es la manera de reforzar una idea que abre un tiempo mítico que dota de realidad y sentido a la práctica, de tal modo que la repetición constituye lo sagrado en el tiempo. Las concepciones de un tiempo cíclico y uno lineal son temas abordados en las obras About the time. En ellas reflexiono sobre la multidimensionalidad mediante la cual lo entendemos: el tiempo como instante, como duración o como ciclo en donde hay un regreso al caos y un recomenzar. Otras piezas se sumergen en el concepto de unión, entendido como la comunión entre las personas en el momento del ritual, fundiéndose entre sí y con la naturaleza. En lo formal, esta confluencia de energías se materializa en la unión de los signos, como eslabones ensamblados se concatenan para generar sólidas cadenas. Mientras en algunas piezas prevalece el accidente controlado, a través del drippping, de la expresividad de la mancha, en otras, más sutiles, el foco está en la sustancia, las características de la materia, su brillo, su constancia. A través de superposiciones y transparencias cubro con texto, toda la superficie una y otra vez, para crear una especie de palimpsesto en donde se esconden una serie de inscripciones, símbolos y gestos que dan cuenta del carácter efímero del lenguaje, así como de la naturaleza hiperbólica del acto de escribir.